“El Laberinto de los Espejos”
comenzará en septiembre de 2016 hasta Julio de 2017. Es un paseo por los
grandes miedos del ser humano a través de sus manifestaciones (cólera, rabia,
envidia, apego, …).
Lo daimónico es una función
fundamental, arquetípica, de la experiencia humana. Entre otros ejemplos,
incluye la codicia del poder, la cólera y la furia. Lógicamente, no nos gusta
descubrir que en nuestra existencia operan algunas de estas fuerzas. Marcados
como estamos por la dualidad bueno/malo, los occidentales pretendemos por
diversos e ingeniosos medios que nada de “lo malo” nos constituya. Así es como
muchas veces terminamos viviendo en un falso y aburrido nirvana, olvidándonos
que en la impetuosidad irracional de lo demoníaco radica buena parte de nuestra energía creadora. Si me repito
muchas veces por día que sólo la bondad existe, ¿lograré que ya no existan la
codicia, la cólera y la furia?
Por suerte no soy sólo mente,
tengo un cuerpo que me envía señales de lo inevitable. Ante hechos así siento
que “la sangre me hierve”, o tengo “un nudo en el estómago”, y por más que
intente poner cara de nada, si alguien se me acerca dirá que tengo una mirada
“llameante”. Metáforas que hablan de los demonios que a veces irrumpen en
nuestra vida y demandan ser integrados y, en todo caso, transformados; algo muy
distinto de la negación y el ilusorio intento de control.
“Tú mismo eres parte del mal, o
no estarías vivo. Cada cosa que haces es mala para alguien. Y esa es una de las
ironías de la creación”, advirtió a sus alumnos el sabio mitólogo Joseph
Campbell. Luego añadió: “Uno de los grandes desafíos de la vida es decir “sí” a
esa persona, a ese acto o a esa condición que a tu mente le parece la más
abominable. Decirle sí a este milagro de la vida tal como es, y no bajo la
condición de que siga tus reglas”.
En todo caso, más allá de la ira
y otras emociones incómodas, cualquier persona a quien le guste bailar, pintar,
escribir o incursionar en alguna expresión artística sabe que tendrá encuentros
inevitables con lo demoníaco, con esa fuerza que nos arrastra a ir “más allá”,
destruyendo y creando al mismo tiempo.
Abrámosle la puerta, entonces, en
el arte y en la vida, a estas crecedoras presencias: ángeles y demonios
coexistiendo en fructífera algarabía…
ENVIDIA: No desees mi vida, desea la tuya en todo caso. Aunque mejor no desees, alíneate con quien eres.
APEGO: El sabor del chicle dura minutos y se queda pegado en boca y dedos cuando se acaba el sabor. Cambiemos el chicle por masticables naturales.
Estas son algunas propuestas....de TRANSMUTACIÓN.
ENVIDIA: No desees mi vida, desea la tuya en todo caso. Aunque mejor no desees, alíneate con quien eres.
APEGO: El sabor del chicle dura minutos y se queda pegado en boca y dedos cuando se acaba el sabor. Cambiemos el chicle por masticables naturales.
Estas son algunas propuestas....de TRANSMUTACIÓN.
A FINALES DE SEPTIEMBRE,
tendréis toda la información. Te acompañaré a pasear por el Laberinto de los
Espejos.